SOBRE PAPÁ NOEL, NEGOCIOS Y FELICIDAD

SOBRE PAPÁ NOEL, NEGOCIOS Y FELICIDAD

Hola, hola. Aquí Lourdes al habla.

Acabamos de llegar de llegar de Pacific Place en Hong Kong a donde llevamos a los peques a ver a Papá Noel. Tengo que reconocer que tanto mi estado de ánimo como mi punto de vista cambiaron sustancialmente después de la experiencia de esta mañana.

Tuvimos que hacer cola durante más de media hora para este importantísimo encuentro, y durante mi espera, no pude dejar de pensar en el magnífico relaciones públicas y empresario que es el señor Noel. Probablemente el mejor de todos los tiempos. Se las arregla para que su fábrica la gestionen unos pequeños elfos quienes, a buen seguro, trabajan felices -festivos incluidos- sin afiliarse a sindicato alguno, sin malestar aparente y sin cobrar horas extras. Y no sólo esto, sino que además se las ingenia para que sus clientes -nosotros- le paguemos la materia prima, y encima, lo hagamos encantados. Se gana todas las felicitaciones del mundo trabajando una sola noche al año, sin una sola reclamación o crítica negativa y con una tasa nula de devoluciones. Tiene una base de datos increíble de clientes hiperfidelizados quienes, no contentos con repetir año tras año, educan a sus hijos para que se conviertan en clientes de por vida.

Y por si fuera poco, por la calle le aclaman a diestro y siniestro y todo el mundo se acerca a él con una amplia sonrisa en la cara, independientemente de que haya stock disponible en ese momento, y marchándose incluso tranquilamente con la promesa de que “llegará en pocos días”. Me pregunto si Amancio Ortega recibiría el mismo trato…

Pero cuando salimos de allí mi punto de vista había cambiado radicalmente. Sólo podía pensar en la alegría de mi hijo Javi por haber podido charlar con Papá Noel. Los ojos le brillaban de ilusión y el tono de su voz reflejaba el momento tan especial que acababa de vivir.

Mami, mami, ¿has visto que Papá Noel también habla español? ¿Oíste cuando dijo que sus renos están aparcados en la azotea de este edificio? ¿Podemos subir a verlos? Y me di cuenta de que probablemente queden solo un par de años para que este mundo de fantasía que rodea a Papá Noel desaparezca para siempre. Ni siquiera pidió un regalo. Estaba feliz simplemente por haberle conocido.

Y entonces fui consciente de que debía disfrutar también este momento como madre… Papá Noel no será el mismo cuando Javi cumpla los 20.

Posted on 01/12/2013 Home 0 1526

Leave a CommentLeave a Reply

You must be logged in to post a comment.

Buscar

Categorías

Anterior
Siguiente