A todos los que nos embarcamos en la aventura de crear nuestro propio negocio, nos gusta pensar que somos “diferentes” al resto. Diferentes en cuanto al producto o servicio que ofrecemos, en comparación a lo que ya existe en el mercado.

Pero me gusta pensar que nosotros, la familia Pingüina, somos diferentes también en otros aspectos.

Que somos diferentes porque de verdad nos gusta escuchar los comentarios que nos hacéis llegar. Somos lo suficientemente pequeños como para ser capaces de leer y revisar el 100% de las observaciones que nos enviáis. Comentarios que, a veces, proceden de personas que ni siquiera son clientes.

Hace quince días recibimos un comentario a través de nuestra página de Facebook. Olaya, que se encarga de nuestras redes sociales, recibió este mensaje y nos lo reenvió inmediatamente. Una persona había entrado en nuestra página web para comprar un SacoPingüino y sentía que la descripción del producto de algunos de nuestros sacos caía en estereotipos de género. Por ejemplo, “SacoPingüino de Abeja para niñas” o “SacoPingüino de Astronauta para niños”.

“Tiene toda la razón”, dije. “¿Cómo es que tenemos esas descripciones?”.

En realidad, era una cuestión de posicionamiento web. Para aparecer en las búsquedas online de nuestros potenciales clientes, la página web debía incluir las palabras “niño” y “niña” en las descripciones y, debido al límite de espacio, nuestro técnico SEO había decidido utilizar “niño” en el Astronauta y “niña” en la Abeja porque no había espacio suficiente para ambos términos. Es cierto que el Astronauta lo eligen principalmente los niños, pero en el caso de la Abeja, gusta a ambos sexos por igual.

“Tenemos que resolver esto. Vamos a contestar el comentario y arreglarlo cuanto antes.”. Y así lo hicimos, a pesar de que nuestro SEO advertía del posible impacto negativo en las búsquedas.

También nos gusta pensar que somos diferentes porque somos una empresa en la que todos trabajamos para vivir y no vivimos para trabajar. La gente se sorprende cuando me pregunta a qué hora empieza a trabajar el equipo pingüino por la mañana y no puedo responderles, porque no lo sé. Empiezan a trabajar cuando lo consideren apropiado y dejan de trabajar cuando sienten que han terminado los objetivos del día. Por eso no me sorprende si me dicen que han visto a alguien del equipo en la playa, a las 11 de la mañana en el mes de julio. Pero también hay que decir que están disponibles a las 10 de la noche de un sábado si hay un asunto urgente.

Y me gusta pensar que también somos diferentes porque realmente nos preocupa la calidad de nuestros productos. No es extraño que desechemos bolsas llenas de patucos porque las costuras no son perfectas. Podemos decir orgullosas que han sido testimoniales los comentarios de clientes descontentos y, en esos casos, hablamos con ellos y revisamos una y otra vez la prenda para comprobar por qué la costura no era perfecta o qué ocurre con la cremallera. Llegando incluso a cambiar el diseño o hacer nuevas pruebas.

Así que, por favor, seguid enviándonos vuestros comentarios. Buenos o malos, os lo agradeceremos.

A todos los que nos embarcamos en la aventura de crear nuestro propio negocio, nos gusta pensar que somos “diferentes” al resto. Diferentes en cuanto al producto o servicio que ofrecemos, en comparación a lo que ya existe en el mercado.

Pero me gusta pensar que nosotros, la familia Pingüina, somos diferentes también en otros aspectos.

Que somos diferentes porque de verdad nos gusta escuchar los comentarios que nos hacéis llegar. Somos lo suficientemente pequeños como para ser capaces de leer y revisar el 100% de las observaciones que nos enviáis. Comentarios que, a veces, proceden de personas que ni siquiera son clientes.

Hace quince días recibimos un comentario a través de nuestra página de Facebook. Olaya, que se encarga de nuestras redes sociales, recibió este mensaje y nos lo reenvió inmediatamente. Una persona había entrado en nuestra página web para comprar un SacoPingüino y sentía que la descripción del producto de algunos de nuestros sacos caía en estereotipos de género. Por ejemplo, “SacoPingüino de Abeja para niñas” o “SacoPingüino de Astronauta para niños”.

“Tiene toda la razón”, dije. “¿Cómo es que tenemos esas descripciones?”.

En realidad, era una cuestión de posicionamiento web. Para aparecer en las búsquedas online de nuestros potenciales clientes, la página web debía incluir las palabras “niño” y “niña” en las descripciones y, debido al límite de espacio, nuestro técnico SEO había decidido utilizar “niño” en el Astronauta y “niña” en la Abeja porque no había espacio suficiente para ambos términos. Es cierto que el Astronauta lo eligen principalmente los niños, pero en el caso de la Abeja, gusta a ambos sexos por igual.

“Tenemos que resolver esto. Vamos a contestar el comentario y arreglarlo cuanto antes.”. Y así lo hicimos, a pesar de que nuestro SEO advertía del posible impacto negativo en las búsquedas.

También nos gusta pensar que somos diferentes porque somos una empresa en la que todos trabajamos para vivir y no vivimos para trabajar. La gente se sorprende cuando me pregunta a qué hora empieza a trabajar el equipo pingüino por la mañana y no puedo responderles, porque no lo sé. Empiezan a trabajar cuando lo consideren apropiado y dejan de trabajar cuando sienten que han terminado los objetivos del día. Por eso no me sorprende si me dicen que han visto a alguien del equipo en la playa, a las 11 de la mañana en el mes de julio. Pero también hay que decir que están disponibles a las 10 de la noche de un sábado si hay un asunto urgente.

Y me gusta pensar que también somos diferentes porque realmente nos preocupa la calidad de nuestros productos. No es extraño que desechemos bolsas llenas de patucos porque las costuras no son perfectas. Podemos decir orgullosas que han sido testimoniales los comentarios de clientes descontentos y, en esos casos, hablamos con ellos y revisamos una y otra vez la prenda para comprobar por qué la costura no era perfecta o qué ocurre con la cremallera. Llegando incluso a cambiar el diseño o hacer nuevas pruebas.

Así que, por favor, seguid enviándonos vuestros comentarios. Buenos o malos, os lo agradeceremos.